miércoles, 13 de agosto de 2014

Para tibio, pastel de manzana

Elegir es ganar y perder 
por Ximena Biosca

Luego de su abarcador musical sobre la vida de Frida Kahlo, Carla Liguori arremete con un musical distinto, más “conceptual”, casi filosófico, centrado en las elecciones y sus consecuencias.

La propuesta es llamativa y diferente desde el vamos, cuando uno de los personajes centrales –el Inevitable, o la metáfora del destino-maestro de ceremonias- invita a la platea a participar interactivamente en la obra, a través de cartas y nos advierte además sobre la necesidad de no ser hipócritas. De acuerdo a la elección del público, la dramaturgia y la vida de los protagonistas seguirán caminos distintos. La puesta plantea a todos los personajes juntos interactuando: eso a veces la potencia y otras hace perder un poco el foco.

La trama es esencialmente dramática pero tiene tintes de humor negro en medio de las tragedias cotidianas. El texto, que se autodefine a partir de las elecciones, genera empatía y mucha identificación. Proponerle a la gente que elija el camino del protagonista puede ser riesgoso, pero acá es donde se aprecia el arte de la estructuración de la puesta, en ese riesgo calculado que impulsa la historia con las opciones elegidas por el público, pero definitivamente sabe adónde va y no la deja al azar.

Parte del atractivo de este musical son las letras (de Carla Liguori y Javier Raffa) y los excelentes músicos en vivo: Agustín Konsol (piano y director musical) y Josela Garante (violín) junto a la guitarra de Roy Cifre –quien asume además uno de los roles protagónicos de las parejas- crean el clima y la atmósfera para que la historia vaya in crescendo y para que los espectadores entren de a ratos nuevamente en el juego de elegir.

Carla Liguori logra conmover sobre todo en la canción que le canta a su padre y en la interacción con Manuel Fleito (su padre en la ficción) en donde logra momentos de gran ternura.

Las luces y la hermosa y evocadora escenografía son eficaces y crean climas, aún en ese espacio que por momentos queda estrecho, en medio del interesante cruce permanente de las historias y los personajes.

Alejandro Vázquez encarna a un escritor que da ritmo y lleva la historia con gran profesionalismo y una potente voz. El trabajo de Pedro Velázquez, lleno de matices, guiños, cumpliendo distintos roles en ese meta rol de inevitable, divierte, emociona y genera intriga. También se destacan las voces de Nicolás Leguizamón, Pamela Tello, Antonella Posso y Mariano Silvapobas –en uno de los roles claves- en la interacción que el juego propone con la platea.

En definitiva un musical coral,  innovador y comprometido que no permite quedarse afuera.

Para tibio, pastel de manzana. Libro y Letras: Carla Liguori – Javier Raffa / Música: Carla Liguori – Alejandro Brukman. Elenco: Alejandro Vazquez – Pedro Velázquez – Manuel Feito – Carla Liguori – Nicolás Leguizamón – Pamela Tello – Roy Cifre – Antonella Posso – Mariano Silvapobas. Músicos: Agustín Konsol (Piano) – Josela Garate (Violín)- Roy Cifre (Guitarra). Dirección General y Puesta en Escena: Carla Liguori Dirección Musical: Agustín Konsol Dirección Vocal Y Arreglos Corales: José Luis Marinelli. Asistente de Dirección: Santiago Tezza Asistente de Producción: Andrea Waizer Diseño de Escenografía: Valeria Brudny / Vestuario: Estudio Saldivia-Spiridone Fotografía: Estudio NN/ Diseño Gráfico: Ep Producciones Producción General “De Eso Se Trata Creaciones Artísticas” / deesosetratacreaciones@gmail.com
Funciones sábados 20 Hs. El Método Kairós Teatro, El Salvador 4530, C.A.B.A. Entrada General $120,00 / Promoción 2 entradas $200,00. Reservas: Por Facebook: De Eso Se Trata Creaciones Artísticas o por mail a deesosetratacreaciones@gmail.com

lunes, 11 de agosto de 2014

Te quiero hasta la luna ¿Ida y vuelta?

La vigencia de ver lo bueno 
por Ximena Biosca

En un supuesto límite del teatro para chicos, adolescentes o jóvenes (o mejor dicho ese teatro que realmente es para toda la familia, eso que escasea en estos tiempos) esta pieza ve la luz en su tercera temporada y esta vez, transformada y resignificada, con la posibilidad de que uno de los protagonistas se dé el gusto y la realice en su propio teatro. Esa preciosa y funcional sala llamada El Método Kairós, que se inauguró este año, encuentra a Francisco Ruiz Barlett lleno de proyectos y claramente disfrutando de la puesta, porque lo que trasunta es justamente disfrute.

Esta obra atemporal, que deja el alma llena y pregona la importancia de mirar lo bueno, a pesar de las diferencias, cuenta con una excelente dramaturgia, una fábula bien contada y una excelente dirección de Matías Puricelli. Ese es uno de sus diferenciales y la razón de su éxito. Las marcaciones de los personajes, que cambian de edad (pasan de tener 7, 12 y 25 años) en cuestión de segundos con pocos elementos, están bien presentadas y son sorprendentemente eficaces.

La historia es la de Pablo y Julia, que se reencuentran luego de una separación para emprender juntos un viaje a la luna, que se habían prometido de chicos. Y como todo refiere a la infancia de ambos, la historia hará hiatos permanentes: de los protagonistas a los 7 años cuando se conocen, a los 12 y en la actualidad de sus 25 años. Es ahí, en esa transformación en escena en donde Barlett y Sofía Gonzalez Gil (toda candidez e ironía en su Julia) ponen a prueba su histrionismo. En pocos segundos y con una increíble economía de medios (la metonimia perfecta) logran la transformación y verosimilitud de sus criaturas de 7,12 y 25 años. Para la generación de los protagonistas habrá guiños reconocibles de parte del imaginario colectivo compartido (la serie Alf, la salida al cine). Es la única referencia a la temporalidad que tiene la obra. Porque lo interesante es que el tema es universal, abarcativo y ecuménico, y por eso mismo siempre vigente. Las luces (otro hallazgo del Kairós), la música –un ukelele- y un buen intérprete pueden decir muchas cosas sobre las diferencias y el amor de una pareja que perdura, enriquecidas de metáforas y simbolismos.

Una obra deliciosa, que dice que se va en dos funciones, pero que como un valsecito y como la canción que acompaña, está condenada a volver por la vigencia de siempre tratar de “mirar lo bueno”.

Te quiero hasta la luna ¿ida y vuelta?  Julia: Sofía González Gil Pablo: Francisco Ruiz Barlett Libro: Matías Puricelli Música original: Francisco Ruiz Barlett Asist. de dirección: Catalina Lascano Dirección de actores: Matías Puricelli Diseño y op. de luces: Martín de Amézola Diseño gráfico: Martín Bayne Fotografía: Vicky Medici Prensa: Varas&Otero Vestuario: Sofía González Gil
Todos los miércoles a las 20.30hs
EL MÉTODO KAIRÓS TEATRO El Salvador 4530 – Ciudad de Buenos Aires Entrada general: $80
https://www.facebook.com/TeQuieroHastaLaLunaIdaYVuelta


Nominados a los Premios Hugo 2014

Los Premios Hugo al Teatro Musical ya llegaron a su quinto aniversario y, el sábado, la asociación civil que los organiza dio a conocer sus ternas en una forma peculiar pero efectiva. De a poco, fue comunicándolas desde sus redes sociales Twitter y Facebook, generando una expectativa inusual en ese ámbito. Hoy los fanáticos ya tienen a sus nominados para la gran ceremonia que se llevará a cabo el lunes 1° de septiembre, a las 21, en La Usina del Arte (Caffarena 1, La Boca), con la conducción de Laura Oliva. La obra más nominada fue Priscilla, la reina del desierto, con 21 candidaturas; mientras que Y un día? Nico se fue, cuenta con 10; Swingers, canciones con swing, 8 y Big Band Show, Bulebú, El club del hit, Juegos de fábrica y Desde mis ojos, una zambita cruel, con 7. El lunes 18 de agosto, a las 19, en el Novotel (Corrientes 1334), con la conducción de Anita Martínez y Marcos "Bicho" Gómez, se realizará la entrega de diplomas a los nominados, seguida de la llamada "previa Hugo", una entrega de galardones a 8 categorías (arreglos musicales, arreglos vocales, adaptación, vestuario, escenografía, luces, sonido y coreografía en infantil) de los 39 rubros que conforman el premio.
Priscilla, la reina del desierto, Company, Y un día? Nico se fue y Al final del arcoíris fueron nominadas como Mejor musical; mientras que Bulebú, El club del hit, Big Band Show y Swingers quedaron en la categoría Music hall, y Pegados, Mundo redondo, Desde mis ojos, una zambita cruel, Amor sin barreras? lo conocí en el Roca, Telemarketers y Juegos de fábrica, compiten por la estatuilla a mejor musical off.
Como mejores actuaciones protagónicas figuran Karina K (Al final del arcoiris), Gabriela Bevacqua (Mireya), Natalia Cociuffo y Cecilia Milone (Company), y Walter Quiroz (Y un día...), Pepe Cibrián Campoy, Alejandro Paker y Juan Gil Navarro (Priscilla). Como intérpretes en music hall quedaron elegidos Natalie Pérez (Swingers), Déborah Turza e Ivanna Rossi (Bulebú), y Martín Bossi (Big Band Show), Diego Reinhold y Sebastián Codega (Bulebú), Matías Mayer y Patricio Wittis (Swingers). Entre los actores de reparto quedaron nominados Omar Calicchio (Priscilla), Leandro Gazzia (Mireya), Ángel Hernández y Dennis Smith (Y un día...), y Magalí Sánchez Alleno (Company), Virginia Kauffman (Y un día...); Sabrina Artaza y Florencia Benítez (Priscilla).
Los nominados como mejores intérpretes de la escena independiente fueron Vanesa Butera (Pegados), Belén Ucar (Juegos de fábrica), Sol Ajuria (Amor sin barreras...), Mariela Passeri (Quiero el beso) y Ana Victoria de Vincentiis (Mundo redondo), y Claudio Pazos (Amor sin barreras...), Ignacio de Santis (Pegados) y Julián Rubino (Desde mis ojos). Los jurados consideraron como mejores directores a Emilio Tamer (Big Band Show), Diego Reinhold (Bulebú), Ricky Pashkus (Y un día...) y Valeria Ambrosio (Priscilla), y en el off a Nicolás Manasseri (Juegos de fábrica), Roberto Peloni (Mundo redondo), Mariano Tenconi Blanco (La fiera) y Juan Álvarez Prado (Desde mis ojos). Las revelaciones del año fueron Martina Zapico (Juegos de fábrica), Virginia Módica (Company), Karina Hernández (Pegados) e Iride Mockert (La fiera), y Luis Podestá (Priscilla), Tomás Fonzi (Y un día...), Patricio Wittis (Desde mis ojos) y Gonzalo Quintana (Telemarketers).
Una de las variantes del género es ese tipo de espectáculos hechos para un solo personaje. Los nominados en ese rubro son La fiera (Iride Mockert), Yo me lo guiso, yo me lo como (Carmen Mesa), Entre él y yo (Susan Ferrer) y Según Cole Porter (Melania Lenoir).
Las mejores coreografías fueron las de Alejandro Ibarra (El club del hit), Elizabeth de Chapeaurouge (Priscilla), Fernanda Provenzano (Juegos de fábrica) y Ricky Pashkus y Juan José Marco (Y un día...). Entretanto, las mejores partituras originales son las de Ale Sergi (Y un día...), Martín Bianchedi (El loco de Asís), Franco Moretti-Hernán López Sosa (Desde mis ojos) y Ian Shiffres-Sonia Álvarez (La fiera).
Los premios deben su nombre a Hugo Midón, por lo tanto, guardan un lugar importante a los musicales infantiles. Las obras nominadas en ese rubro son Locas canciones para mirar, Pegamundos, Rebelius y Mucho con poco. Paula Sánchez, Constanza Urrere, Héctor Presa y Los Cantayasos fueron nominados en mejor dirección del rubro; mientras que en coreografía están Mecha Fernández, Ricky Pashkus, Gustavo Carrizo y Alejandra Rappazzini. Como mejor partitura en musical infantil quedaron nominados Carlos Gianni (por dos obras), Gaby Goldman, Luis Borda y Jorge Soldera. Como mejores intérpretes en infantil/juvenil fueron considerados Florencia Otero, Valeria Zlachevsky, Geraldine Farhat, Brenda Chichlowski y Denise Cotton, y Fede Fedele, Leonardo Spina y Jorge Maselli.
Los premios serán transmitidos en vivo por La Once Diez (AM 1110, Radio de la Ciudad), mientras que aún no se conocieron detalles sobre el canal que los transmitirá por televisión. Se anticipa que en la ceremonia habrá cuadros de los musicales nominados, además de una gran obertura con más de 30 artistas en escena celebrando los cinco años de este galardón teatral.

Fuente: La Nación